Guinea, julio de 2017. Recibimos formación en el área del Compromiso con las Escrituras. Después de reflexionar sobre nuestras motivaciones y convicciones con respecto a la Palabra de Dios, cada uno de los participantes escribió su propio salmo. Después de pasar 30 minutos escribiendo volvimos a reunirnos y cada uno leyó su salmo en voz alta. Fue un tiempo muy profundo adorando a Dios. Después de escuchar todos los salmos, compartimos nuestras experiencias. Estas son algunas de las reacciones: “Nos lleva a tener un espíritu de oración”. “Cuando todos iban leyendo sus salmos yo no quería que terminase nunca”. “Era como estar en contacto directo con Dios”.
Lean uno de estos salmos, escrito por Axel Aurenche Gbelia, un estudiante de Costa de Marfil:
He leído libros
Me han educado
He leído libros
Incluso intenté culturizarme
Pero he leído el Libro
La obra de arte de Dios
Su álbum, Su manuscrito
Que va desde la prehistoria hasta el futuro
He leído el Libro
Ese diseño y esas palabras celestiales
La historia de la relación de Dios con el hombre
Y del hombre con Dios
He leído el Libro
Ahora sé de dónde vengo
Quién dice Dios que soy
Quién soy y a dónde voy
He leído el Libro
El folleto de Dios, su trabajo
Mis desiertos florecen de nuevo
Mis lágrimas se regocijan
He leído el Libro
El decreto y la escultura de Dios
Puedo llorar de gozo
e incluso río en medio de la desgracia
Yo sé quién es Él
Es el glosador y el Dios de las letras
Es el historiador de los siglos y el escritor supremo
He leído el Libro
He leído Su Libro
Más que formado
Más que educado
Más que enseñado
Más que convencido
He sido cambiado de por vida