Cuando Zhenya asistió a una ceremonia de graduación en la capital de su país natal, en Eurasia, se dio cuenta de que había centenares de estudiantes internacionales. Habían estado viviendo allí durante 5 años y estaban a punto de irse, probablemente sin haber escuchado el evangelio…
Su deseo de alcanzarlos con las buenas nuevas de Jesús parecía un objetivo imposible. Sin embargo, después de 12 años, gracias a la dirección y provisión del Señor, ahora existe un ministerio de estudiantes internacionales floreciente, y el cual incluye a estudiantes procedentes de otros países sensibles.
En el centro de este ministerio, se hallan la hospitalidad y la Palabra de Dios. Hice algunas preguntas a Zhenya para que podamos descubrir más:
1. ¿Cómo estudias la Biblia con estudiantes internacionales?
Ahora tenemos entre 25 y 40 estudiantes que se reúnen, cada semana, en un pequeño apartamento donde apenas caben. Allí cocinamos, comemos y estudiamos juntos las Escrituras. Es muy importante que los estudiantes se sientan seguros y puedan hacer sus preguntas, debatir y también discrepar, con respeto, partiendo de las bases de la amistad.
Para nuestros estudios bíblicos inductivos, imprimimos el pasaje en todos los idiomas hablados por los estudiantes que están presentes, lo que hace que la Palabra sea accesible para todos. Después de que el líder haya hecho sus preguntas acerca del texto, nos dividimos en pequeños grupos, según el idioma de los estudiantes, y, en cada grupo, un líder estudiantil ayuda a facilitar el debate.
Es muy importante que hagamos preguntas. El líder debe hacer buenas preguntas que guíen a los demás a través del pasaje y los estudiantes deben ser capaces de hacer sus propias preguntas sobre el texto para que ellos mismos descubran lo que dice y ¡sean retados a seguir buscando!
2. A lo largo de los años, ¿qué has considerado como algo importante en el estudio de la Palabra con estudiantes procedentes de diferentes contextos culturales?
Diría que existen tres elementos principales:
a. Las historias: ¡Los estudiantes aprenden a partir de historias! Por lo general, estudiamos los Evangelios y, a veces, historias acerca de los “héroes” del Antiguo Testamento. La tarea principal es permitir que el texto hable por sí mismo y que los estudiantes escuchen acerca de Jesús.
b. Los recursos visuales: En un contexto multicultural y plurilingüe, es muy importante poder visualizar la historia a través de vídeos que ilustren la historia, representaciones del pasaje por parte de los estudiantes, haciendo dibujos o reconstruyendo la historia.
c. La puesta en práctica en la vida real: Los líderes deben guiar adecuadamente a los estudiantes, partiendo de lo que los estos han dicho y ayudarles a ver lo que el pasaje significa en sus propias experiencias.
3. ¿Tienes algún testimonio de cómo la Palabra de Dios ha impactado a un estudiante en concreto?
“Maria”, que procede de un pequeño país musulmán, es un ejemplo. En sus propias palabras, “Maria” pensaba que ya conocía la verdad y sentía curiosidad por sus amigos cristianos, que creían plenamente en Jesús. Aunque todavía creía en su dios, empezó a descubrir la verdad de Jesús a medida que fue asistiendo a los estudios bíblicos. Sin embargo, al cabo de dos años, se dio cuenta de que creía en un dios y estaba estudiando a otro, por lo que sabía que no podía permanecer entre dos aguas para siempre.
Cada semana, “Maria” siguió descubriendo más acerca de Jesús a través de las Escrituras, hasta que decidió empezar a seguirle a Él.
Reflexionando acerca de Juan 10, testifica que:
“Fui capaz de escuchar la voz del Buen Pastor… Y Él me ha guiado a tomar esta decisión”.
Paula
Secretaria Asociada de IFES para el Compromiso con las Escrituras






“La Palabra en medio nuestro” es un recurso muy valioso que hemos implementado como parte de la capacitación a nuevos líderes estudiantiles en Jalisco. El librito ha ayudado a los estudiantes profundizar sus convicciones sobre las Escrituras, a cultivar una actitud de amor a la Palabra, los ha animado y desafiado a vivir su fe conforme a la Palabra, les ha animado a confiar en el poder e impacto de la Palabra.
Empiezo mis charlas con las preguntas más profundas que subyacen bajo el tema: ¿Cómo podemos formar nuestra identidad y auto-estima? ¿Qué implicaciones tiene vivir en una sociedad que basa su identidad en los logros? ¿Logro, luego existo? ¿Esto cómo afecta a nuestra sociedad, a nuestras relaciones y a nuestro ser? Planteo preguntas, propongo análisis y observamos las respuestas que nos ofrecen las tendencias actuales de nuestra sociedad. Entonces relaciono el asunto al pasaje de las Escrituras, explicando cómo y por qué Dios puede formar parte de la imagen, y observamos juntos el contexto bíblico.
El Experimento Marcos es una iniciativa que tiene este objetivo. Los estudiantes invitan a sus compañeros a venir a ver esta obra de 90 minutos que trata de la vida de Jesús. Se representa con el público formando un círculo (ver foto). De esta forma los espectadores son atraídos a lo que está ocurriendo, en lugar de observar desde la distancia. Después de ver la obra, un estudiante no cristiano de Chile dijo: “Es difícil no llorar. Y es increíble pensar que esto quizás haya ocurrido de verdad”. Los estudiantes escuchan el evangelio de una forma real y atractiva.